Vivo
de tardes de guerra,
de batallas de fatales consecuencias
como cojear de risa
o fingir que me duele una caricia,
cambiando el sueño
por enredarnos
en las sábanas,
de jugar sin saber a qué
pero con idéntica ilusión
que si lo supiera.
Quizá sea este juego que no sé
mi juego preferido.
Quizá sea que es cierto
que La vida es bella,
como aquella película...
de tardes de guerra,
de batallas de fatales consecuencias
como cojear de risa
o fingir que me duele una caricia,
cambiando el sueño
por enredarnos
en las sábanas,
de jugar sin saber a qué
pero con idéntica ilusión
que si lo supiera.
Quizá sea este juego que no sé
mi juego preferido.
Quizá sea que es cierto
que La vida es bella,
como aquella película...
Vivo
de tardes como esta,
cuando jugamos a nada
y pasamos toooda la siesta.
2 comentarios:
llamo domingos astrománticos... pero hace tiempo que no los tengo :(
me encantan esas sabanas arrugadas,
relax total
un besazo de Cora
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