Después de desatarse los elementos,
después de moverse la tierra
entre sus piernas,
el aire pesaba,
y en la penumbra de las farolas
su mano colgaba
al otro lado de la cama
con la pose caprichosa y elegante
de cuando modelan las rocas
cien años de oleaje.
La lista de deseos
Hace 2 semanas
5 comentarios:
ese cien años de oleaje se me ha clavado en el corazón, precioso
cuerpos extraños de cada planeta...
Uyy que bella noche...!
Muy sentido y descriptivo tu texto, un abrazo :)
Los dos últimos versos me han encantado!!
La verdad es que pueden pasar tantas cosas en la oscuridad...
Chulisima tu descripción de un momento tan especial...... Demos luz para vivirla........
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